LLEGAN A MI DUCHA.
No sé qué sucede con los bichos que me circundan. Debe ser que vivo en la punta del cerro o a que una noche decidí dejar todas las noches abierta la ventana que da a mi ducha. (Que la dejo abierta para que se desvanezcan mis humores, mis hedores, mis sudores, mis genios, mis índoles, mis condiciones, mis agudezas, mis disposiciones, mis afectos, mis temores, mis terrores, mis lástimas, mis emociones y todas mis complacencias).
La cuestión es que rigurosamente todas las mañanas aparece en la bendita ducha – entre vivo y muerto - un bendito animalito, un bello insectito o un sabio unicornio.
Por ello - con ese afán proteccionista – es que desde hace un tiempo a esta parte
he salvado de la inanición a una babosa mañosa, a un picaflor adormecido, a una mariposa embarazada, a una arañita de todos los rincones, a un ratoncillo de cola corta, a un chercán galante, a una culebra de tres cuerpos, a un jurel de cerro, a una salamandra belicosa, a una colegiala sin jumper, a una notaria embelesada, a un cowboy bi y a una Miss Universe inteligente, que fue lo que salvé precisamente anoche.
Y SI NO HUBIESE PASADO AQUÍ?
La noticia humana impactante de la semana: 12 norteamericanos muertos en Arica.
Para nosotros impactante y para sus familiares.
En Irak la noticia no lo sería. En Basora, en Bagdad, no lo sería. En Mosul, en Tikrit, en An Najaf, no lo sería. Para qué decir en Hadithah o Kurbala. En Irak hasta para mucha gente esta matanza sería una buena noticia.
OJOS INEXPRESIVOS
Desde que alguien me dijo que mi perro Cocker Spanish –regalo tuyo- tenía los ojos inexpresivos me volví un mirador compulsivo de los ojos de perros de todos mis amigos, parientes, vecinos y transeúntes. Yo que siempre aseguré desde mi inexperiencia, que todos los perros ponían sentimiento en la mirada entré en la duda.
Afortunadamente después de ese enorme trabajo empírico y teórico he llegado, al fin, a las siguientes conclusiones que comprueban mi inicial apreciación:
Raza de Perro Tipo de ojo
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1.- BEAGLE: Juguetones.
2.- BOXER: Agresivos.
3.- BUL DOG: Perezosos.
4.- GALGOS: Más veloces.
5.- MASTÍN NAPOLITANO: Majestuosos.
6.-PASTOR ALEMÁN: Policiales.
7.- POINTER: Galopadores.
8.- ROTTWEILER: Feroces.
9.- SAN BERNARDO: De curao.
10.- SHIH-TZU No se le ven los ojos. Presumo son cansados.
11.- POODLE: Amariconados.
12.- COCKER SPANISH: Expresivos.
HABRÁ HECHO BIEN,PRESIDENTA?
Desde el domingo en la noche que una pregunta vital ronda por mi cabeza...¿Habrá hecho bien la M.B. aceptando que la M.H. haya cantado en su fiesta de la Cultura?
Con una mano derecha, en mi corazón que siempre ha estado a la izquierda, digo que sí.
EN CUATRO PATAS
Sorpresa ha causado en los ámbitos científicos el descubrimiento de parte de una familia de 13 hijos en una aldea remota en Turquía cuatro de los cuales caminan en cuatro patas. Su estudio podría dar luces sobre el eslabón perdido entre los cuadrúpedos y los bípedos, dicen.
Y yo digo, qué nos extrañamos tanto si acá en Chile todavía existe una gran cantidad de cuadrúpedos-cuadrúpedos. Si los hubiésemos estudiado antes ese eslabón estaría resuelto.
RIESGOS DE LAS AUTOPISTAS
Venía rajado desde Conchalí por la CINCO NORTE camino a Cerro Navia por cierto atrasado. O sea venía claramente desde el Norte hacia el Sur pa tomar la Costanera Norte al Poniente.
No me preguntes cómo fue que fue eso, pero siguiendo todas las pertinentes medidas y señales sin saber cómo ni cuándo me encontré de vuelta al Norte por 14 de la Fama directo a Vi-Va-Ce-Ta. NÁ QUÉ VER!!
No me asusto en todo caso: me suele suceder. Así me pasó contigo.
MUCHAS MUJERES ESTE 8 DE MARZO
“Es un día para tomar conciencia
de lo que las mujeres hemos conseguido
y del camino que nos falta por recorrer”
C r i s t i n a A l m e i d a.
Tengo la fortuna de conocer muchas mujeres. Muchas. De ésas de terciopelo, impolutas, pero no por ello menos resueltas y definidas. Mujeres rústicas, desaprensivas, garabateras. Pero no por ello menos resueltas y definidas. Mujeres de todos los ámbitos y clases. Conozco muchas mujeres.
Tengo también la fortuna de tener tres hijas mujeres. Tres modos, tres escalofríos diferentes. Un compendio del género creciendo a mi lado.
Como muchos hombres - no los suficientes - he aprendido a que me gusten las mujeres cuando nos acarician nos remueven nos castigan nos despeinan. He aprendido a que me encanten cuando defienden sus hijos del mar que pretende arrastrarlos o cuando se ovillan cayendo por las escaleras para no dañarlos. He aprendido a que me apasionen cuando aman por sobre todas las cosas con ese amor que les desborda la piel.
He aprendido a amarlas incluso en sus debilidades que aún siéndolas, son más fortalezas que las nuestras.
Y las extraño cuando comparto exclusivamente un tiempo con hombres porque la sal la ponen precisamente ellas.
Por ello este 8 de marzo no puedo menos que alzar mi copa de vino por ellas, por todas ellas, por las que a comienzos del XX, se unieron, dejaron la resignación y se levantaron y lucharon. Por ellas.
Por las que sostienen, han sostenido y sostendrán hogares y familias.
Por las que se entregan, se han entregado y se entregarán a distintas causas.
Pero por sobre todo las que nos aman, nos han amado y algún día nos amarán.
UNA LITUANA EN PROVIDENCIA (Marzo 2.002)
EN HOMENAJE A UNA LITUANA EXTRAÑA PERO DERECHA.
Después de 4 años volví a Providencia con Thayer Ojeda, mis espacios por 15 años.
Todo estaba distinto, todo estaba igual.
Cafés con nombres y mozos nuevos. Bancos con bancarios y nombres nuevos. La Pizza Nostra convertida en El Liguria.
El mismo Raúl vendiendo plantas, Lucho, mi lustrabotas. Gente de pueblo: receptores de mis mierdas entre proyecto y proyecto cuando bajaba a botar un poquito las neuras.
Te recordé entonces.
Inconmovible, lejana, extranjera, extraña, difusa. De abrigo. Miren que con abrigo en verano a la intemperie. Con un perro en la falda en verano.
Jugabas con las sensaciones que producías en los hombres. Los manejabas bien sabiéndote atractiva.
Comencé a verte desde lejos continuamente, constantemente: foránea. altanera, etérea. Puedo decir ahora que sólo tu perro te unía a la tierra y los terráqueos.
Un día me acerqué, pleno verano, 19:30 hrs., mucho calor aún, tú con abrigo y con el perro. Un Schnauzer Miniatura. Mezcla de perro de raza y quiltro que detesté.
Quería que me cayeras bien. Quería que me agradaras. Quería caerte bien. Quería agradarte. Ninguna de esas cosas conseguí .Yo sabiéndome interesante. Tú sabiéndote interesante.
Afortunadamente fue recíproco. 1ª carrera: perdida.
Nunca vi tanto empeño desaprovechado. Nunca tantas ganas de herir en tan poco tiempo. Sólo algo conseguí: que no se levantaran tu Schnauzer y tú y y me dejaran botado, y yo que sólo me levanté cuando mi secretaria me vino a buscar. (Los cafés de la zona eran otro hall de mi oficina. También los restaurantes.)
Así empezó lo que empezó que nunca fue gran cosa. Una extraña pequeña-gran cosa.
No eras chilena. Qué duda cabía. Parecías de ex algún país de la ex Cortina de Hierro de la ex Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas. Eras una ex. Qué duda cabía.
Al final lo reconociste: Lituania.
Aunque hablabas como italiana de Florencia, argentina de Córdoba, isleña de Cuba, francesa de Orleáns. Esa facilidad lingüística que tenías y con la que desorientabas a los que se acercaban a nuestra mesa a conocerte, lo que si bien me daba cierto orgullo, me molestaba porque no sabía que las lituanas eran tan coquetas pero serias.
Recuerdas cuando discutíamos sobre el gentilicio de los habitantes de Florencia, tu ciudad preferida?...Es florentino, como te decía yo.
Tenías varias peculiaridades, varias. Que te hacían irrepetible. Una en particular: nunca mirabas a los ojos. Característica que es mala y que es buena. Mala porque escondías el hilo que iba desde tus hermosos ojos-miel a tu meollo, al meollo de tu lituano corazón. Buena porque nunca supe si existía ese hilo entre esos ojos y ese maldito meollo.
Como desaparece una lituana en Providencia, que es como aparece una lituana, desapareciste.
Recién ahora con el correr de los tiempos he llegado a saber que la capital de tu país era Vilnius.
VISITEN ESTA COCHINÁ
MANÍAS
Voy a contestar la weá de las manías sólo porque me lo pide la Renata. Yo a ella no podría negarle nada…ejém…o casi nada. Y sobretodo porque quiero superar mi principal cyber-manía que es no incorporarme a iniciativas gregarias a las cuales no les veo sentido y que me parecen una forma de lucimiento intelectual que no busco. Onda: la mejor manía un súper ocho!
Pero, en fin, bueno, ok.
MANÍA UNO: Pensar que llenar el estanque del auto es un despilfarro porque a lo mejor me muero de improviso con el estanque lleno.
MANÍA DOS: Sacarme las costras antes que las heridas cicatricen, lo que en el cuerpo me ha dejado huellas pero en la vida buenos resultados.
MANÍA TRES: Dormir contigo sólo hasta las 6 de la mañana y luego hacerte el amor.
MANÍA CUATRO: Echarle dos sacarinas al té, cuando bien podría echarle una ó tres.
MANÍA CINCO: Servirme el té hirviendo para luego esperar que se enfríe y tomarlo incluso con 2 cubitos de hielo!
SUS CINCO Y CINCO MÁS.
MANÍA SEIS: Escribir grandes ideas en pequeños papeles que extravío produciéndome gran congoja.
MANÍA SIETE: Creerme los cuentos que no debo creerme, sobretodo si detrás de ellos hay un par de inmensos ojos soñadores.
MANÍA OCHO: Guiarme por mi intuición masculina que a todas luces es peor que la femenina.
MANÍA NUEVE: Dar consejos – aunque atinados – cuando no me los piden y desatinados cuando me los piden.
MANÍA DIEZ: Equivocarme cada vez que me dan la oportunidad.
No sé qué sucede con los bichos que me circundan. Debe ser que vivo en la punta del cerro o a que una noche decidí dejar todas las noches abierta la ventana que da a mi ducha. (Que la dejo abierta para que se desvanezcan mis humores, mis hedores, mis sudores, mis genios, mis índoles, mis condiciones, mis agudezas, mis disposiciones, mis afectos, mis temores, mis terrores, mis lástimas, mis emociones y todas mis complacencias).
La cuestión es que rigurosamente todas las mañanas aparece en la bendita ducha – entre vivo y muerto - un bendito animalito, un bello insectito o un sabio unicornio.
Por ello - con ese afán proteccionista – es que desde hace un tiempo a esta parte
he salvado de la inanición a una babosa mañosa, a un picaflor adormecido, a una mariposa embarazada, a una arañita de todos los rincones, a un ratoncillo de cola corta, a un chercán galante, a una culebra de tres cuerpos, a un jurel de cerro, a una salamandra belicosa, a una colegiala sin jumper, a una notaria embelesada, a un cowboy bi y a una Miss Universe inteligente, que fue lo que salvé precisamente anoche.
